La carne de pollo es una de las más ricas y saludables que existen, y su color es una señal de frescura y calidad. Los comensales generalmente buscan estas dos cualidades para determinar si el producto será de su agrado.
Sin embargo, hace tiempo la carne de las aves no eran como la conocemos hoy en día. Antes la coloración correspondía al correcto desarrollo de los animales, ya que los criaban en campos donde comían en parte insectos y plantas con altos grados de pigmentación.
Actualmente, debido a los descubrimientos en nutrición y genética, las aves ingieren menos alimento y no tienen acceso a fuentes naturales. Para alcanzar el color de la carne que tanto atrae a los consumidores, los productores de pollo empezaron a agregar alimentos con pigmentos rojos y amarillos, como la cantaxantina (un carotenoide encontrado en crustáceos, peces, algas y hongos) y otros carotenoides como la luteína y zeaxantina.
Categorías