Aunque el tamaño de las semillas es pequeño, son las responsables de producir toneladas de alimentos para los habitantes del mundo.
Lamentablemente, el cambio climático y otras acciones provocadas por el hombre han puesto en riesgo la diversidad de los recursos fitogenéticos.
Para impulsar su conservación, se pueden emprender ciertas acciones:
- Defender los derechos de los agricultores locales y conseguir que tengan un rol activo en la toma de decisiones en la industria.
- Invertir en la investigación científica y los avances tecnológicos enfocados en la recuperación de las semillas.
- Generar conciencia social para proteger las tierras de cultivo y frenar el calentamiento global.