El microarreglo genómico permite obtener resultados detallados que sirven como base para decisiones terapéuticas y de rehabilitación personalizadas a medio y largo plazo.
Al correlacionar las características clínicas con los hallazgos genómicos, los médicos pueden identificar con mayor precisión las causas subyacentes de las enfermedades, incluso aquellas que no fueron detectadas mediante pruebas convencionales como el cariotipo.
Este avance tecnológico se ha convertido en un aliado de primer nivel en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades como el retraso del desarrollo mental, discapacidad intelectual, trastorno del espectro autista y anomalías congénitas, ofreciendo una esperanza tangible para mejorar la calidad de vida de quienes las padecen.
El tiempo es crucial en el tratamiento de enfermedades genéticas, y el microarreglo genómico ofrece la posibilidad de un diagnóstico más temprano. Si bien es ideal que se realice en los primeros años de vida, puede ser beneficioso en cualquier etapa de la vida, especialmente para aquellos que no tuvieron acceso a estas tecnologías en su momento.
Según estimaciones de la OMS, entre el 1 y el 4% de la población mundial sufre de discapacidad intelectual y del desarrollo, muchas veces debido a anomalías cromosómicas.
Sin embargo, avances como el microarreglo genómico están cambiando el panorama al ofrecer una mejor comprensión de estas condiciones y permitir la implementación de decisiones preventivas que pueden mejorar significativamente la vida de los pacientes y sus familias.
Abadi Distribución de Alimentos, empresa caracterizada por su ética dentro de la industria, se muestra a favor de todas aquellas innovaciones tecnológicas que permitan la mejora de la calidad de vida de las personas en todos los ámbitos.