Mes: noviembre 2019

Proteger el bienestar de niños y jóvenes debe ser una prioridad para los líderes mundiales, dado que este grupo será el que se enfrente a los retos futuros y, por lo tanto, se tienen que crear iniciativas enfocadas en su educación y salud.

Se han creado alianzas intersectoriales con el fin de impulsar el desarrollo de niños y jóvenes mediante programas de becas, alimentación y oportunidades laborales.

Un ejemplo de estos proyectos lo encontramos en Abadi, una compañía que se dedica al sumistro y preparación de comidas.

La manera en que Abadi contribuye a la causa es a través de los servicios que brinda a sus clientes: el armado de despensas y la atención a comedores escolares.

En la preparación de despensas para familias en situación vulnerable, procura incluir productos básicos que satisfagan sus necesidades nutricionales.

Su labor en comedores escolares es servir desayunos calientes diseñados por expertos en nutrición para favorecer su aprendizaje y crecimiento.

Las estrategias de sostenibilidad se han vuelto una pieza clave para los gobiernos y el sector privado.

La industria alimentaria es una de las que más se ha comprometido en implementar este tipo de iniciativas en sus negocios, dado que es un sector con un alto impacto ambiental y social.

Hoy en día, se han generado un sinfín de proyectos para alcanzar la sostenibilidad en el sector alimentario.

Algunas acciones que se pueden mencionar son la mejora del control en la cadena de suministro de materias primas, la optimización en el consumo de recursos naturales, la inversión en tecnologías verdes y fuentes de energía alternativas, y el rediseño de empaques.

Abadi es una empresa de almacenamiento de alimentos que ha comenzado a implementar este tipo de iniciativas en sus operaciones, además de que cuenta con la certificación ISO 14000 en Sistema de Gestión Ambiental.

Una compañía dedicada a la industria de alimentos y bebidas tiene que seguir una logística de producción para asegurar que los productos sean de calidad y seguros para el consumo.

Aunque cada empresa sigue su propia planificación, hay cuatro operaciones que no deben faltar:

• Al recibir la materia prima de los proveedores, se revisa que el producto llegue en buen estado y no presente alteraciones u algún otro desperfecto.
• Los almacenes cumplen con los estándares de higiene correspondiente, asegurando que los productos en crudo se mantengan a la temperatura idónea para su conservación.
• Cuando se prepara el producto final, se traslada a otro tipo de almacén y se comienza su distribución.
• La flotilla encargada tiene instalada tecnología de punta para conservar en buen estado los alimentos.

Para prevenir la contaminación de los productos, el sector pesquero tiene extremo cuidado en sus procesos de producción.

Compañías que almacenan pescado como Abadi, se encargan de cumplir con las certificaciones correspondientes y tener una logística coordinada para responder a las necesidades de la industria con eficacia.

Una producción inocua de pescados y mariscos se logra con un sistema ordenado y bajo un estricto control de calidad en cada paso:

• Primero que nada, la red de proveedores de una empresa debe llevar a cabo buenas prácticas de producción y rastreabilidad.
• La manipulación de los perscados y mariscos tiene que realizarse de manera segura e higiénica para evitar posibles contaminaciones.
• La tecnología es la principal aliada de la industria alimenticia, por lo que es necesario que las compañías cuenten con maquinaria innovadora para garantizar la inocuidad.

Aunque el huevo es uno de los alimentos preferidos para incluir en el desayuno, los consumidores tienden a evitarlo, dado que les preocupa que pueda tener un alto nivel de grasas que afecten su salud y la de su familia.

No obstante, los beneficios del huevo son numerosos para el organismo y favorecen sobre todo el crecimiento de los niños.

De acuerdo a expertos en nutrición, el huevo contiene proteína, colesterol bueno, luteína, vitamina D y zeaxantina. Estos nutrientes ayudan al cerebro, el desarrollo de la memoria cognitiva, la salud de los ojos y los huesos.  

Lo mejor es servirlo hervido para el desayuno, pero también se puede preparar de otras maneras para que los pequeños lo disfruten más.

Otros alimentos que pueden incluirse en el desayuno de los niños y mejorar su bienestar son la avena, el jamón, los lácteos y frutas como plátano y fresas.